(We are) The Dream of God | Prólogo

Buenas noches bollos hermosos.
Demasiado tiempo sin subir nada, ¿verdad? Me disculpo. He tenido unos días muy extraños así que no quise subir nada bajo la influencia de tantos sentimientos encontrados.

Pero, hablando de lo importante. Como véis ha aparecido una nueva portada salvaje, y ya sabéis lo que significa eso, ¿cierto?

Este FanFic es muy especial, por una parte porque es la adaptación de una serie de rols que tuve con una bellísima persona en este foro hasta que decidieron cerrarlo y, por otra parte, porque sin ella no habría podido hacerlo. La mitad (o más) de la historia le pertenece, así que espero que os guste tanto como a mi este proyecto que ha sido pausado forzosamente por el momento.
No os preocupéis, lo continuaremos.

¡Disfrutadlo!

Título: (We are) The Dream of God
Parejas: Sohee x Hwayoung / Otras
Tipo: Yuri
Género: AU | Romance | Drama | Angst
Advertencias: Lemon, lenguaje grosero, enfermedades mentales, violencia de género, consumo de sustancias, incesto, auto-lesiones, muerte de personajes.
Notas: Dedicado a todos aquellos que quieran sufrir y llorar

Estado: En proceso

Inicio del FanFic | Capítulo 1

Si quieres leer, dale a...

PRÓLOGO — UNA SERPIENTE EN EL JARDÍN

Divini sacri. Occultum habet arcanus obscur.

“No puedo con esto, no puedo más. Los sentimientos me superan a tal grado que siento que quiero morir. De hecho, preferiría hacerlo a verte con alguien más, eso me superaría, sé que lo haría, me conozco. He soñado varias veces con ello, lo he imaginado, te he visto agarrando la mano de otra persona que no soy yo y los celos me consumen por dentro, me queman. Siento que me ahogo y que no aguantaré mucho más.

Soy una persona débil, floja, fea, inútil, lenta, idiota. Soy una idiota que parece disfrutar el consumirse por un amor no correspondido, un amor que desde el primer momento comenzó a doler. No es tóxico, soy yo la que lo está volviendo venenoso dentro de mi mente. Nunca creí tener la oportunidad de hablarte, de conocerte, de abrazarte; sentía que eras inalcanzable, idílica, etérea, lejana a mí. Sentía que pertenecías a otro universo, que estabas en mi mundo por diversión, por curiosidad, por querer tener a alguien con quien hablar. Y me alegra que hayas encontrado en mí un punto de apoyo, más teniendo en cuenta lo penosa que soy para las relaciones humanas, pero siento que quiero llorar cada vez que te veo o pienso en ti, como ahora. ¿Dónde está la mujer que conocí borracha en un taxi?

He dejado escapar tantas indirectas sin poder mirarte a los ojos que siento que soy una cobarde sin remedio, alguien sin salida en este mundo colmado de mierda, alguien que cada vez siente más lejana tu mano, tu olor a vainilla, tu tacto cálido y suave. Tu pequeño y hermoso cuerpo.

Me duele, no es justo tenerte tan cerca y a la vez tan lejos, ¿qué he hecho yo para merecer esto? Debería haberme matado hace mucho tiempo, quizás así no te habría conocido y podría descansar en paz bajo tierra. Conoces mis problemas, sabes que sufro, que me vuelvo pequeña, que me acurruco en un rincón de la habitación y deseo fundirme para no volver a ver la luz del sol. Se me hace cada vez más difícil imaginarte sin alguien a tu lado, los tienes a todos detrás de ti, esperando a que des un nuevo paso para poner sus manos contra tu espalda, procurando así que no te caigas, pero a la vez acechando para llevarte con ellos. Hombres. Qué asco.

Deja de ser tan hermosa, por favor, no me castigues de este modo.

Yo no puedo cambiar, soy así, soy lo que ves, un puñado de sentimientos confusos, diluidos en agua, o quizás en lejía. Esto me supera, se me forma un nudo en la garganta y me prohíbe respirar, siento una presión en mi pecho que nunca antes había sentido. La idea de no volver a verte se me hace dolorosa, muy dura, pero creo que es lo mejor. No creo que sea la persona adecuada para ti, y antes de que el dolor también te alcance, te digo adiós.

Tienes tus ideales, tus deseos, tus locuras,… y yo no puedo cumplir con lo que me pides, soy insignificante a tu lado, te siento tan inalcanzable que mis manos duelen, los dedos se me entumecen de tanto aire que han apretado pensando que ahí habría un poco de tu olor. Incluso tenerte delante se me hace eternamente doloroso. ¿Por qué eres así? ¿Por qué tuve que conocerte? No es justo, creí que podría llegar a ser feliz contigo, realmente lo creí. Pobre ilusa, pobre insensata. Antes, mucho antes, dormir me ayudaba; ahora deseo no acostarme nunca más para que no aparezcas en mis sueños con esa cara infantil y regordeta y me sueltes con toda la ilusión del mundo que estás saliendo con alguien.

Claro que, si quieres matarme hazlo, adelante, no te cortes.

Mátame, pero hazlo rápido, creo que ya he sufrido lo suficiente. Solo quiero eso, sentir que puedo cerrar los ojos sin que vengas a mi mente y me sonrías, llamándome con esa voz chillona, sintiendo tu olor en mi ropa, agarrándome con aquellas manitas tan pequeñas, provocando en mí una serie de chispas que me engañan y me hacen creer que soy importante para alguien. Nunca lo he sido y nunca lo seré, no hay más, aquí acaba todo.

Me han quedado tantos besos por darte, tantos abrazos que regalarte, tanto amor con el que mimarte… pero supongo que mi tiempo contigo ha terminado. No soy fuerte, aquí tienes la prueba, la cosa se ha acabado, no me atrevo a dar un paso más contigo, no quiero hacerme daño, pero sobretodo no quiero hacértelo a ti, eso nunca, no me lo perdonaría. No te equivoques, no te odio, simplemente te venero demasiado y mi corazón ya no puede dedicarte más tiempo, lo noto flojo y dañado. Reseco.

Y escuece.

Y daña.

Y mata.

Y he deseado morir muchas veces, pero recuerdo que soy una cobarde y ni siquiera eso se me daría bien. Me doy asco. Me doy asco por todas las mentiras que te he dicho, porque he intentado hacerme la fuerte y no lo he conseguido, porque exploto en llanto en cada rincón solitario que encuentro, porque he intentado ser de utilidad y no lo he logrado. Por esto y por muchas cosas más es que he decidido alejarme de ti, porque no creo que merezca sufrir tanto por un amor tan inalcanzable.

Me estoy pudriendo, y ni siquiera tu olor a vainilla va a lograr que ese hedor quede disimulado. Yo solo quería ser feliz a tu lado, pero pides mucho, o quizás soy yo la que no puede darte nada. Deseo tenerte, pero si esto no puede ser, prefiero no existir. Lo siento.

Te ama, te desea y te recuerda,

Hwayoung"